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La OIT, que reúne a representantes de gobiernos, trabajadores y empleadores, se constituyó en 1919 en virtud de lo dispuesto en la Parte XIII del Tratado de Paz de Versalles, con el que se puso fin a la Primera Guerra Mundial.

El derecho a escolarizarse durante la infancia, afiliarse a un sindicato, constituir una empresa sin sufrir discriminación, trabajar en condiciones seguras y recibir un trato digno son derechos consagrados en las normas internacionales del trabajo de la OIT.

La elaboración de normas internacionales del trabajo en la OIT constituye un proceso específico en el que colaboran gobiernos, trabajadores y empleadores de todo el mundo. Muchos principios que hoy se dan por sentados, en particular la igualdad de género y la no discriminación en el trabajo, se debatieron por primera vez a escala internacional en la OIT

La misión fundamental de la OIT de esforzarse por lograr un futuro laboral mejor para todos hace que tenga que entender y prever los factores de cambio que contribuyen a transformar el mundo del trabajo en la actualidad.

Desde hace décadas, la OIT realiza estudios y proyectos de asistencia en varios países, lo que ha resultado en la formulación de políticas que fomentan la promoción y la creación de empleo decente.

Es por esto que la OIT ayuda a los países a establecer las instituciones pertinentes y formular políticas basadas en el diálogo entre representantes de gobiernos, empleadores y trabajadores. Los retos para lograr el trabajo decente son complejos, al igual que sus soluciones.

A lo largo de la última década, la OIT ha promovido el desarrollo de los sistemas de protección social en 136 países, lo que incluye:

La protección social universal es clave para alcanzar varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. Sin ella, no es posible erradicar la pobreza, reducir la desigualdad y lograr la igualdad de género.

Una de las formas en que los gobiernos pueden garantizar el cumplimiento de la legislación laboral en el lugar de trabajo es velando por la implementación efectiva de la misma.

25 millones de personas son víctimas del trabajo forzoso en el mundo. De ellas, el 44 % migró internamente o a otro país para encontrar trabajo.

El objetivo de la OIT es proporcionar información más exhaustiva sobre prácticas de contratación eficaces, mejorar las legislaciones, políticas y mecanismos de implementación de las mimas, promover prácticas empresariales responsables y empoderar y proteger a los trabajadores.

Fuente: OIT Uruguay

Detalles Técnicos

Fecha de emisión: 25/04/2019
Código: 2019/17/C
Valor: $ 65
Diseño gráfico: Alejandro Muntz
Tirada: 15.000 sellos
Plancha: compuesta por 4 sellos